Cuando una persona se dedica a una actividad con
verdadera pasión, nada puede detenerla, ningún
obstáculo es insalvable e incluso se puede superar
cualquier problema de salud. En el mundo del ajedrez
existen varios casos de superación personal en pos de
seguir disfrutando del juego, aunque fuese a través del
sufrimiento personal. Vamos a conocer tres ejemplos,
aunque a lo largo de la historia del ajedrez hubo muchos
otros:
Jean Dufresne: ajedrecista recordado por su derrota
ante Anderssen en la
'Siempreviva'. Fue un apasionado del
ajedrez, trabajó como periodista y profesor de ajedrez,
escribiendo varios libros sobre este deporte. Dufresne
era sordo y tenía una salud quebradiza, a pesar de
ellos jugaba con entusiasmo, siempre al ataque, aunque
en muchas partidas le fallaban las fuerzas y terminaba
sucumbiendo en posiciones donde tenía ventaja. Por
cierto, su nombre real era E. S. Freund.
Edgar
Colle, Jonathan Penrose y Jean Dufresne
Edgar Colle: brillante jugador táctico que
tenía condiciones para haber llegado muy alto, sin
embargo su precaria salud, que le acompañó durante
toda su vida, le limitó de forma extraordinaria. Si se
observan las fotografías que se le tomaron mientras
jugaba, en muchas de ellas se puede apreciar a Colle con
un gesto de dolor. En estas condiciones es complicado
alcanzar el nivel de concentración que exige el ajedrez
de competición, por lo que los torneos se le solían
hacer eternos. Fue operado multitud de veces y falleció
muy joven, a los 34 años, al no poder superar una
operación de úlcera gástrica.
Jonathan Penrose: jugador que tenía una
brillante carrera por delante, pero unos extraños
problemas de salud frenaron sus aspiraciones. En
partidas largas solía terminar extenuado físicamente,
a pesar de su juventud. El problema se agravó en el
congreso de Ilford de 1969, cuando sufrió un colapso
durante una partida. Estos problemas volvieron a hacer
aparición al año siguiente durante la Olimpiada de
Siegen, forzando a Penrose a retirarse tras las primeras
rondas. Tras un estudio meticuloso, los médicos no
lograron detectarle ningún problema grave, aunque le
recomendaron no jugar torneos largos ya que su cuerpo no
podría soportarlo. Penrose no hizo demasiado caso y
siguió participando en torneos, aunque su actividad en
el tablero fue decayendo al dedicarse con más
intensidad a su profesión (era profesor de psicología).
Javier
Cordero Fernández
(5
Mayo 2012)
BIBLIOGRAFÍA
"Enciclopedia
de ajedrez" -
Harry Golombek
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