Emanuel Lasker fue famoso por ser campeón del mundo del
ajedrez durante casi 3 décadas. Pero esa no fue su única
ocupación, cursó estudios de filosofía y tenía
grandes conocimientos de psicología. Tal vez fue el
primero en llevar estos elementos al tablero, su juego
variaba según el rival que se sentaba ante él y según
las circunstancias que rodearan a la partida. Lasker
trataba de aprovechar cualquier ventaja, aunque ésta no
tuviese nada que ver con el ajedrez. De ese modo el
aspecto emotivo empezó a cobrar importancia: el
cansancio, el miedo al rival, los nervios, la angustia
ante la derrota, etc.
Esta partida no es habitual del estilo de Lasker, más
bien es un ataque contra el rey al estilo romántico. Un
enroque está constituido por 3 peones, Lasker decidió
que la mejor manera de llegar al rey enemigo era demoler
su fortaleza piedra a piedra y así lo hizo, la brecha
abierta en el enroque
fue aprovechada por las piezas que aun quedaban en pie y
la victoria cayó finalmente del lado de las blancas. |