Gary Kasparov nació el 13
de Abril de 1963, en Baku (Azerbayan).
Hijo de un ingeniero judío
y de ascendencia armenia por vía materna. Su padre
falleció cuando Gary sólo tenía 8 años y su madre,
Clara Kasparova, se hizo cargo de su educación (el
apellido con el que se le conoce es una derivación del
de su madre).
Gary
Kasparov junto a su madre, Clara
Fue su madre quién impulsó
la afición de Kasparov por el ajedrez, le enseñó a
jugar a los 6 años y al ver que su hijo tenía
cualidades (con 7 años solucionó un problema de
ajedrez que varios adultos no habían conseguido
resolver) le matriculó en la Escuela Botvinnik de
ajedrez. Su gran potencial impresionó a Botvinnik, que
se dio cuenta enseguida de que Kasparov tenía algo
especial y llegó a comentar: "Sus condiciones de
juego y su memoria son excelentes, y su instinto para el
juego recuerda al gran Alekhine". También su gran
rival, Anatoly Karpov, asistió a la escuela Botvinnik y
pudo aprender mucho del ex-campeón del mundo.
En 1975 se produce su
primer encuentro con Karpov, Gary tenía 12 años y
participó en una sesión de simultaneas dada por el
campeón del mundo. Kasparov perdió esta partida, pero
presentó batalla hasta el final. Nadie se podía
imaginar en ese momento que esta iba a ser la primera
partida de una rivalidad que resultaría legendaria.
Desde sus comienzos, Gary
intuyó que para poder competir en la élite del ajedrez
era necesario una preparación física conveniente. Por
ello practicaba varios deportes con la idea de
mantenerse en perfecta forma física, como por ejemplo
salto de altura, fútbol, natación, ciclismo o hockey
sobre hielo. Con los años siguió dando gran
importancia a este aspecto, algo que parece bastante lógico,
ya que una partida de más de 6 horas supone un desgaste
físico enorme.
Su salto a la fama fue
inesperado, ocurrió en 1979 en el torneo de Banja Luka
(Yugoslavia). Los organizadores estaban molestos con el
equipo soviético por alinear a un joven desconocido y
sin ranking internacional, apellidado Kasparov (que sólo
tenía 16 años). Gary se encargó de acallar las críticas
ganando el 1er premio por delante de 12
grandes maestros y superando la norma
de GM internacional en 2'5 puntos. Una poderosa
demostración de personalidad y talento, con partidas
donde desplegó un juego táctico digno de su
personalidad. (Ver
tabla).
Uno de los pilares sobre
los que se sostenía la vida de Kasparov era su madre
Clara, ella le inculcó el espíritu de sacrificio que
le acompañó durante toda su carrera y le enseñó que
nada se consigue si no se aplica el máximo esfuerzo. Su
madre siempre le acompañaba a los torneos y resultaba
un apoyo importantísimo para el campeón ruso. Durante
su adolescencia fue Botvinnik el encargado de asesorar y
aconsejar a Kasparov, tratando de convertirle en un
jugador ambicioso, luchador y creativo (creo que está
claro que dichos consejos fueron tenidos en cuenta por
Kasparov).
Su ascenso resultó meteórico
e imparable, sus triunfos y su forma de jugar estaban
marcando el nombre de Kasparov a sangre y fuego. Pero
Gary no se iba a detener ahí, su ambición era infinita
y no estaba dispuesto a desaprovechar ninguna
oportunidad. Su primera aparición en la enrevesada maraña
que permitía luchar por el campeonato del mundo tuvo
lugar en 1982, en el Interzonal de Moscú, donde
Kasparov dominó con insultante superioridad: primero
con 1'5 puntos sobre el segundo, tras no perder ninguna
partida. El 'Ogro' había conseguido una plaza para el
torneo de candidatos que se iba a celebrar en 1983. A
pesar de su juventud, Gary entraba en la lista de
favoritos y no defraudó a nadie, logró victoria tras
victoria con un gran juego: en cuartos de final apeó a
Alexander Beljavsky (6-3), en semifinales a Viktor
Korchnoi (7-4) y en la final al ex-campeón del mundo
Vassily Smyslov (8'5-4'5). Kasparov obtenía de este
modo el derecho a disputar el título con el vigente
campeón del mundo, Anatoly Karpov. Esta iba a ser la
primera batalla de la más cruenta 'guerra' de la
historia del ajedrez, una rivalidad que sirvió para que
el ajedrez traspasase fronteras y que atrajo a un número
ingente de nuevos aficionados.
El
gran duelo: " La doble K "
1er
Match - Moscú 1984
La historia de este espectacular
duelo tuvo su comienzo el 9 de septiembre de 1984,
primer envite de un encuentro que levantó más
expectación que el match entre Fischer y Spassky. Se
enfrentaban dos jugadores completamente opuestos, dos
filosofías distintas de entender el ajedrez: Kasparov
osado y amante del estilo romántico, Karpov frío como
el hielo, calculador y con una precisión digna de una
computadora. Se estipuló que el match llegaría a su
fin cuando uno de los dos participantes ganase seis
partidas. Kasparov poseía un talento descomunal, pero
era muy inexperto y esto se tradujo en un 5-0 tras las
primeras 27 partidas (22 en tablas). Pero justo en ese
momento, Karpov cambió su forma de jugar, confiado por
su superioridad empezó a buscar el sexto triunfo
corriendo algún riesgo y lo que se encontró fue con
una derrota que cambió el rumbo de los acontecimientos.
A esa derrota siguieron muchas partidas que finalizaron
en empate, pero el match había entrado en una dinámica
diferente, ahora era Karpov el que sufría para entablar
y el joven aspirante el que dominaba la situación.
Karpov sólo se encontraba a una victoria del triunfo
final, pero se le veía cansado y acobardado ante el
empuje de su joven rival. Dos victorias seguidas de
Kasparov (47ª y 48ª partidas) presagiaban el
hundimiento del campeón, pero entonces llegó la gran
polémica, Florencio Campomanes, presidente de la FIDE,
declaró el match como terminado porque se estaba
alargando en demasía y los jugadores estaban agotados.
El match se declaró nulo, una decisión que favorecía
a un exhausto Karpov y que nadie acertó a comprender. (Ver
tabla).
Este fue el encuentro menos vistoso de los que
disputaron Kasparov y Karpov. De hecho, fue duramente
criticado por la prensa internacional por la falta de
lucha que imperó en la mayoría de sus partidas.
Palabras como aburrimiento y poca competitividad
aparecieron en todos los escritos. Al comienzo del match
se batió el récord de periodistas acreditados, pero
con el paso de las partidas se batió otro récord: el
de periodistas que huyeron despavoridos ante la falta
total de noticias.
2º
Match - Moscú 1985
Tras la gran polémica
generada, las aguas volvieron a su cauce con la repetición
del match en Septiembre de 1985. Evidentemente había
que cambiar el formato del encuentro y se decidió poner
un límite máximo de 24 partidas. La expectación
generada era máxima y se llegaron a pagar cantidades
desorbitadas en la reventa de entradas. El match no
defraudó a nadie y resultó espectacular. Karpov llegó
a adelantarse 3-2, pero Kasparov logró reaccionar,
gracias a un inmejorable ajedrez táctico, para ponerse
por delante 8'5-7'5. A falta de 3 partidas Garri ya
dominaba por 11'5-9'5. Karpov estaba contra las cuerdas,
pero en un alarde de voluntad logró una nueva victoria
para llegar a la última partida con un resultado de
12-11 (y jugando con blancas). Hay que mencionar que el
empate a puntos le hubisese dado el título a Karpov,
por lo que la expectación era máxima. Pero Kasparov
quería demostrar al mundo su grandeza y en una soberbia
partida obtuvo el triunfo y por ende la victoria final
por 13-11, tras mes y medio de dura lucha. Kasparov se
había proclamado nuevo CAMPEÓN DEL MUNDO. (Ver
tabla).
En este match, Kasparov
consiguió sorprender a Karpov con una gran preparación
en las aperturas, su fuerza e intensidad en el tablero
hicieron el resto. Karpov también desplegó un juego de
gran nivel, mostrándose tan sólido como siempre, pero
en frente tuvo una ambición inquebrantable. Anatoly
supo pelear hasta el último segundo, a pesar de su
inferioridad, y demostró mucha garra y tesón,
cualidades dignas de un guerrero como es el ruso.
Gracias a esta victoria,
Kasparov se convirtió en al campeón del mundo más
joven de la historia, con 22 años y 210 días.
3er
Match - Londres, Leningrado 1986
Estaba estipulado que si
Kasparov ganaba el match de 1985, tenía que conceder
una revancha al año siguiente. Ésta se celebró entre
Londres y Leningrado, en el verano de 1986. Este fue el
match en el que Kasparov se mostró más fuerte, a pesar
de todas las dificultades que tuvo para prepararlo. Una
de los escollos que tuvo que superar fue la aparición
de un "topo" dentro de su equipo de
preparadores. Este espía filtró parte de los análisis
para el match, como los estudios y mejoras de la
apertura Grünfeld, que era la que habían planeado
utilizar con más asiduidad (esta es la versión del
equipo de Kasparov).
Kasparov comenzó tomando
ventaja, mostrando una gran fuerza en su juego, pero
Tolia se repuso y consiguió igualar la situación. A
partir de la octava partida, Kasparov vuelve a dominar y
logra una gran ventaja, en la decimosexta partida:
9'5-6'5. Pero una vez más Karpov consigue levantarse,
cual ave fénix, y gana 3 partidas consecutivas. Justo
en este momento, Vladimirov es expulsado del equipo de
Kasparov acusado de ser el topo. La espadas están en
todo lo alto, Kasparov gana la vigésimo segunda partida
y se pone por delante 11'5-10'5 a falta de sólo dos
partidas. Las dos últimas acaban en tablas y Kasparov
retiene su título por un total de 12'5-11'5. (Ver
tabla).
Tras la expulsión de
Vladimirov, Karpov bajó mucho su rendimiento y dejó de
adivinar las variantes preparadas por el equipo de
Kasparov. Nunca llegaremos a saber si esta historia fue
cierta o sólo un arma utilizada por el equipo del campeón
para cambiar la dinámica del encuentro a su antojo.
4º
Match - Sevilla 1987
Tomémonos un respiro para
elogiar a estos dos jugadores, auténticos gladiadores
que luchaban con gran intensidad durante matches muy
largos, algo que supone un enorme desgaste físico y
psicológico. Tal vez el aspecto más importante de
estos encuentros es el desgaste mental y los constantes
cambios en el estado de ánimo de los jugadores: euforia
tras el triunfo, hundimiento tras la derrota, miedo,
presión... Por eso, tanto Kasparov como Karpov, tenían
largas sesiones con psicólogos e incluso ambos llegaron
a buscar la ayuda de videntes, amuletos e incluso de
parapsicólogos... todo vale para llegar hasta la
victoria.
El cuarto match tuvo lugar
en el teatro Lope de Vega de la capital hispalense, como
en el anterior duelo, el campeón se dirimiría tras 24
partidas. Karpov comenzó dominando tras ganar la
segunda partida, pero hacia la mitad del campeonato
Kasparov había logrado voltear la situación y se imponía
por medio punto. Una vez más la igualdad presidía el
match, algo que siempre caracterizó estos duelos y que
fue una de las razones por la que fueron seguidos a lo
largo y ancho de todo el planeta.
El juego de Kasparov no
tuvo la fuerza de otras ocasiones, tal vez el miedo a
perder su corona le atenazaba. La decimosexta partida se
la apuntó Karpov, con lo que lograba igualar el
marcador. Se llegó a las dos ultimas partidas con un
incierto 11-11. La penúltima partida se la apuntó
Karpov, tras una variante errónea utilizada por
Kasparov. Karpov estaba por delante 12-11, quedaba una
sola partida y le servían unas simples tablas... pero
surgió el Ogro de Baku con toda su fuerza y energía
enfocada para lograr la victoria. Tras una dura lucha,
en la que supo explotar la pequeña ventaja lograda en
el medio juego, consiguió derrotar a Tolia y retener el
título (las normas estipulaban que a empate de puntos
el título no cambiaría de dueño). Al finalizar la
partida la sala entera se puso en pie y rindió una
larga ovación al campeón del mundo. Gracias a este
match la afición al ajedrez en España sufrió un gran
impulso, miles de aficionados siguieron las partidas con
inusitado interés. El 4º match acabó 12-12 (4
victorias para cada uno y 16 tablas), el más igualado
de todos. (Ver
tabla).
5º
Match - New York, Lyon 1990
La preparación de
Kasparov para este match fue deficiente, descuidó mucho
su entrenamiento para atender algunos asuntos de carácter
no competitivo, como su cruzada contra la FIDE. Una vez
más el duelo levantó una gran expectación y fue
patrocinado por grandes empresas estadounidenses e
internacionales. La parte jugada en New York fue de un
nivel más bien bajo, ninguno de los dos consiguió
alcanzar un nivel óptimo, algo que supuso una gran
decepción tras las expectativas levan por las polémicas
declaraciones que los jugadores cruzaron antes del
inicio del encuentro. Las tablas se sucedían (sólo 1
victoria para cada uno) y el match perdió la atención
de los medios y de la afición.
Con empate a puntos el
match se trasladó a Lyon, con la esperanza de que el
espectáculo mejorase... y así fue, pero sin alcanzar
el nivel de anteriores duelos. Karpov demostró estar
mejor preparado en la teoría de aperturas, pero esto no
fue suficiente para destronar a Kasparov. Gary terminó
venciendo ajustadamente por 12'5-11'5, este match fue
quizá el más flojo, lo que se vio reflejado en un
descenso en el número de aficionados que lo siguieron.
(Ver
tabla).
Una vez relatados los
duelos de las dos K, volvamos al año 1985. Garri empezó
a colaborar en la escuela de ajedrez Botvinnik, en
calidad de asociado, coincidiendo con su reapertura (había
estado 8 años cerrada). Hay que decir que Kasparov se
reunía con frecuencia con Botvinnik en busca de
consejo, la influencia del gran patriarca soviético
resultó siempre muy positiva para Garri. A partir de
1986 la escuela pasó a denominarse Escuela
Botvinnik-Kasparov y todos los jóvenes talentos de la
URSS pasan por ella: Tiviakov, Akopian, Kramnik,
Shirov...
En 1988 Kasparov empezó a
luchar por los derechos de los jugadores y por un mayor
reconocimiento para el ajedrez. Todos estos esfuerzos no
influyeron demasiado en sus resultados y siguió
cosechando grandes resultados en los torneos a los que
acudía. En esa época el ajedrez había ganado
popularidad y gracias a ello se invertía mucho dinero
en organizar buenos torneos, como Bruselas o Groningen.
Garri buscaba fijarse metas altas, entre ellas llegar a
superar la barrera de los 2800 ptos ELO, algo que nadie
había conseguido hasta entonces... y lo logró en el año
1990, para unos años después llegar a establecer un máximo
de 2851 puntos, algo que nadie ha superado y que veo difícil
que se pueda repetir.
En 1989 Kasparov se
enfrentó a la computadora Deep Thought (campeona del
mundo de programas), en New York. El duelo fue bautizado
con el llamativo nombre, "Mente contra
materia". El duelo constaba sólo de dos partidas y
Kasparov obtuvo el triunfo en ambas sin demasiadas
dificultades, parece que los programadores tendrían que
trabajar muchas horas aún para poder inquietar al campeón
del mundo. Hay que mencionar que ésta no era la primera
vez que 'el ogro' se enfrentaba a una computadora, ya lo
había hecho en 1985, en la ciudad de Hamburgo, donde
disputó 32 partidas ante una decena de programas,
venciendo en todas ellas. En aquella época las
computadoras de ajedrez estaban todavía en fase de
desarrollo y no supusieron ningún problema para
Kasparov.
En 1991, durante la
desintegración de la URSS, llegó uno de los episodios
más duros de su vida. Su país, Azerbayan, se vio
afectado por la lucha que se había desencadenado tras
la caída del régimen soviético. El conflicto fue de
gran crudeza y los armenios que no fueron asesinados,
fueron expulsados del país. El propio Kasparov tuvo que
ser evacuado al correr serio peligro al estar aislado y
cercado en una población a 40 km de la capital. Tras
estos acontecimientos, Kasparov decide involucrarse de
lleno en política y descuida su preparación en el
ajedrez, lo que repercute en su juego y resultados.
Ese mismo año estaba
obligado a volver a defender su corona de campeón del
mundo, se organizó un torneo de candidatos y pocos ponían
en duda que el ganador sería Karpov... pero la vida
siempre nos reserva alguna sorpresa y otro jugador
triunfó en ese torneo. Karpov superó con dificultades
a Anand, pero se vio sorprendido en semifinales por el
inglés Nigel Short, que le derrotó por 7'5-5'5. Short
logró vencer en la final a Jan Timman y ganó de este
modo el derecho a luchar por el título que ostentaba
Kasparov. Esto supuso el fin del duelo de las dos K en
el campeonato del mundo, fueron un total de 124
partidas, un duelo apasionante e irrepetible que
catapultó al ajedrez a las más altas cumbres y lo situó
en los medios de comunicación del mundo entero.
El match con Short no llegó
a celebrarse, desde el principio hubo discrepancias económicas
y problemas con la elección de la sede. Ambos jugadores
protestaron y acusaron a la FIDE de especular con la
sede buscando sólo beneficios económicos. Finalmente,
Kasparov y Short se negaron a jugar y la FIDE tomó una
decisión drástica y polémica: retirar la ficha
federativa a ambos jugadores. Con esta resolución la
FIDE había creado un cisma que perjudicaría
terriblemente al ajedrez y que no se resolvería hasta
17 años después. La FIDE buscó dos sustitutos para
que el match pudiese celebrarse y los escogidos fueron
Karpov y Timman, semifinalistas del torneo de
candidatos. Karpov no podía dejar pasar esta
oportunidad y recuperó su corona perdida al vencer por
12'5-8'5.
Ante esta sucesión de
acontecimientos, Kasparov y Short decidieron crear una
asociación desvinculada de la FIDE: la PCA (Professional chess players).
Esta asociación organizó su propio campeonato del
mundo (no oficial), cuyo primer match fue disputado
por los dos jugadores rebeldes. Kasparov barrió del
tablero a Short por 12'5-7'5 y se proclamó primer campeón
del mundo de la PCA.
En 1994 Kasparov vuelve a
ser sancionado por la FIDE con motivo de la creación de
la PCA, era la confirmación de unas desavenencias
que se habían transformado en una lucha encarnizada. De
este modo, Kasparov fue retirado de la lista ELO oficial
y se le prohibió participar en cualquier competición
auspiciada por la FIDE. La situación comenzó a bordear
el ridículo, existían dos torneos de candidatos, uno
para cada federación, y los mejores jugadores repartían
sus esfuerzos entre ambas competiciones.
En 1995 el indio
Viswanathan Anand se apunta el triunfo en el torneo de
candidatos de la PCA, obteniendo de este modo el derecho
a jugar su primera final en un campeonato del mundo. El
match se celebró en New York y Kasparov volvió a
vencer con relativa comodidad por 9-7 (5 victorias 3
derrotas y 8 tablas).
El año 1996 trajo un
nuevo reto para Kasparov, le esperaba un enfrentamiento
ante un rival monstruoso: la computadora Deep Blue. El encuentro
tuvo lugar en Philadelphia y Kasparov venció por 4-2 (3
victorias, 1 derrota y 2 tablas), mostrando cierta
superioridad a pesar de que la máquina comenzase
ganando en la primera partida. El duelo levantó gran
expectación y los aficionados ansiaban un nuevo
enfrentamiento... por lo que Kasparov concedió una
nueva oportunidad a los programadores de IBM al año
siguiente. Las mejoras de Deep Blue eran enormes, sobre
todo en su capacidad de cálculo... y la 'tragedia' llegó
en forma de derrota del ser humano, Kasparov se vio
doblegado por 3'5-2'5 y uno de los grandes temores de la
humanidad, ser dominada por las máquinas, sobrevoló en
la imaginación de muchas personas. Podéis conocer los
detalles de ambos duelos en otro artículo incluido en
'Ajedrez de ataque': (Ver
artículo).
Toda persona tiene cosas
de las que arrepentirse y Kasparov no iba a ser menos.
En 1998 protagonizó un lamentable incidente en el que
perjudicó gravemente a Alexei Shirov. El letón había
ganado el match de candidatos de la PCA frente a
Vladimir Kramnik, pero la final nunca llegó a
celebrarse porque Kasparov puso todas las trabas
posibles, sobre todo de tipo económico, para evitar que
las negociaciones llegasen a buen puerto. Parece ser que
Kasparov prefería que su rival fuese Kramnik, su gran
protegido, al que no puso ningún impedimento cuando se
negociaron las nuevas condiciones. Todos estos hechos
volvieron a sumir en la mayor de las vergüenzas al
mundo del ajedrez y enmaraño aun más la disputa de la
corona mundial.
Hablemos mejor de las
cosas positivas que Gary aportó al ajedrez, como la búsqueda
de nuevas fórmulas para dar una dimensión mundial a
este deporte. En el año 1999 jugó una partida
denominada "Kasparov-El Mundo", en ella
Kasparov se enfrentó por Internet a aficionados de todo
el planeta, los cuales eran aconsejados por los jóvenes
maestros: Etienne Bacrot (16 años), Irina Krush
(15 años, mejor jugadora de Estados unidos), Florin
Felecan (19 años) y Elizabeth Paehtz (14 años). Entre
movimiento y movimiento existía un margen de 24 horas,
el resultado fue una victoria para el ogro que consiguió
derrotar al planeta entero (3.000.000 de aficionados de
75 países). No fue tarea fácil ya que los aficionados
presentaron dura batalla, permitiéndose el lujo de un
sacrificio de pieza en la jugada 11. La partida
transcurrió de la siguiente forma (Ver
Partida). |