El ajedrez es un juego que se presta, como ningún otro,
a la creación de belleza. Esa belleza puede llegar de
distintas formas: a través de una partida táctica o un
bonito estudio artístico. Pero a veces, en muy raras
ocasiones, la armonía llega a través de la simetría
de una posición. Entonces parece que un mago ha
realizado unos pases mágicos para poder llegar a esa
situación estética y uno no puede dejar de
maravillarse de lo ocurrido en el tablero. Para
comprender de que estoy hablando, lo mejor es poner 3
ejemplos que rozan lo paranormal:
Dodge
- Houghteling
Chicago
1904
NOT.
FEN:
r6r/pppk1ppp/8/8/2P5/2NbbN2/PPnK1nPP/1RB2B1R w - - 0 17
¿Se puede dar un mate más simétrico?. Las piezas
menores negras se bastaron y se sobraron para dar mate
al rey enemigo. Y lo hicieron apoyándose unas a otras,
en una coordinación simétrica que da a esta partida
una belleza difícil de creer.
Si reproducen la partida, verán que tras la jugada 15
de las blancas la posición también es simétrica en
cuanto a las piezas menores, algo increíble.
NN
- Bacrot
ICC
Internet 2005
NOT.
FEN: 8/8/8/8/4nnn1/4nnn1/2k5/7K w - - 0 156
Partida blitz jugada por el GM Etienne Bacrot en
internet. En una posición cerrada, Bacrot tenía 5
peones por 6 de su rival, pero una pieza de más,
ventaja que aprovechará para ir ganando peón tras peón
hasta llegar a una posición con 5 peones y un caballo
contra el rey enemigo.
Como su rival no abandonó, el GM francés decidió
darle una bonita lección coronando todos sus peones en
caballos. El mate final es tan bello como extraño,
digno de un estudio artístico. La partida duró un
total de 155 movimientos.
Rybka
- Nakamura
ICC
Internet 2008
NOT.
FEN: K7/2bb4/1bbb4/3k4/8/8/8/8 w - - 0 272
Esta partida es similar a la de Bacrot, pero con alfiles
en lugar de caballos. En una posición extremadamente
cerrada, Nakamura sacrificó la calidad y ambos bandos
se pusieron a realizar movimientos a la expectativa,
hasta que el japonés entregó su segunda torre por un
alfil. Las dos torres blancas no servían de nada entre
la maraña de peones y el caballo y alfil negro, más móviles,
empezaron a recuperar peones. El final, con 6 peones y
dos piezas negras contra el solitario rey blanco era
impensable cuando las blancas contaban con le ventaja de
doble calidad. El mate es tan estético como el anterior
y bastante difícil de conseguir. La lucha duró 271
movimientos, la mayoría de ellos insulsos cuando la
posición era cerrada. |