El campeonato del mundo ha
empezado movidito. En la primera partida Topalov barrió
del tablero al actual campeón del mundo y lo hizo en sólo
dos horas. Fue una partida típica del estilo de
Topalov, corriendo ciertos riesgos y apretando con gran
energía. El búlgaro ha vuelto a demostrar que no
piensa especular con el resultado, esa manera de lanzar
los peones de su enroque contra el rey de Anand son toda
una declaración de intenciones. Una gran partida para
abrir boca, muy aleccionadora para el aficionado ya que
fue una demostración de como explotar la mala colocación
del rey negro y de como sacar un gran rendimiento a las
torres cuando se colocan en la séptima fila.
Pero Anand no se ha amilanado y ha respondido con un
triunfo en la segunda partida. Parecía que la derrota
de la partida inaugural le podía haber dejado noqueado,
pero no ha sido así, se ha mantenido en pie y ha sabido
contraatacar. Curiosamente también ha sido un triunfo
muy típico del estilo del jugador indio, mostrando una
técnica depurada y exprimiendo la posición al máximo.
Por el momento las cosas han comenzado bien, parece que
este match promete espectáculo y el aficionado siempre
será el gran beneficiado de ello. |