Las competiciones por equipos en Europa se hacen cada año
más fuertes. Un buen ejemplo es España, en cuya final
suelen jugar muchos de los mejores jugadores del mundo.
Son competiciones especiales, donde prima la estrategia
ideada por el capitán del equipo y donde se pueden ver
muchas tablas rápidas que convengan al resultado global
del grupo.
Pero también suele ser habitual ver grandes partidas,
los jugadores se suelen encontrar liberados de la presión
del resultado individual de un torneo y pueden correr más
riesgos en el tablero. Buena prueba de ello la estamos
teniendo en Dagomys, donde se están dando varias
partidas con claro predominio del juego combinativo.
Figuras como Shirov, Ivanchuk, Gelfand o los mejores
jugadores rusos dan calidad a este torneo, que además
está teniendo el aliciente del buen juego. |