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Hay partidas que te dejan un regusto dulce tras haberlas
reproducido. Golpes inesperados, juego abierto, riesgo,
son palabras que en ajedrez son sinónimo de diversión.
Esta partida concentra todas ellas en sus 58 jugadas.
Con ambos reyes expuestos, el que ataca primero suele
tener gran ventaja... así lo supo ver Victorija Cmilyte,
que se lanzó a por su presa sin pensárselo dos veces.
Un ataque contundente en el que las blancas consiguieron
abrir varias vías de agua en la defensa negra. Pero las
sorpresas no finalizaron ahí, Katerina Lahno logró
salvar una situación muy complicada gracias a una serie
de combinaciones que llevaron la partida a una situación
de ahogado... poco premio para Cmilyte y mucho para su
rival.
En Wijk aan Zee se suele ver uno de los grandes espectáculos
del año. Los focos suelen apuntar en dirección al
torneo 'A', pero la luz también llega al resto de
torneos, lo que los convierte en una gran oportunidad
para jugadores que buscan acceder a la élite del
ajedrez. Esto se nota en la forma de jugar. En los
torneos 'B' y 'C' se suelen ver partidas entretenidas,
mucha lucha y ganas de agradar. Por contra, en el 'A'
suele haber más conservadurismo, con jugadores que ya
han llegado a lo más alto del ajedrez y no quieren
perder su sitio, lo que hace que busquen no correr
riesgos innecesarios, ya que no tienen nada que
demostrar. Dentro de lo que cabe es razonable, aunque se
debería de intentar cambiar esta inercia para que el
ajedrez de alto nivel se vuelva más interesante. |
