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El juego de Kramnik ha sufrido una metamorfosis en los
últimos tiempos, se ha vuelto más táctico y atrevido,
y menos especulativo. Parece que el anuncio de una
retirada no muy lejana ha hecho que quiera vivir sus últimos
años en el ajedrez de otra forma, disfrutando más en
el tablero. Buena prueba de ello es esta partida, en la
que destroza al número 1 mundial aprovechando una mala
apertura de éste para lanzar un ataque imparable contra
el enroque. Hay que recordar que la partida era a ritmo
rápido, 25 minutos por jugador.
La carrera de Kramnik ha supuesto muchas línea en la
historia reciente del ajedrez. Su aparición (allá por
el año 1989) fue muy prometedora, grandes resultados y
mucho talento, acompañados de alguna partida
verdaderamente brillante. Kramnik fue ascendiendo de
forma imparable, acumulando un palmarés envidiable. Su
llegada a lo más alto del ajedrez no estuvo exenta de
polémica, primero por su duelo con Shirov (timo de
Cazorla) y más adelante por su match con Topalov. Con
el paso de los años parece que Kramnik se hastió del
ajedrez, se volvió conservador y en ocasiones poco
competitivo. Su nombre se asoció a las tablas rápidas,
fama más que justa si se recuerdan anécdotas como la
ocurrida en una edición de Dortmund donde el ruso
ofreció tablas repetidamente en la tercera jugada ante
la cara de asombro de su rival. Su reputación, al menos
de cara al aficionado, cayó en picado, participaba en
pocos torneos y cuando lo hacía daba muestras de poca
ilusión y mucho conformismo.
Kramnik
durante su juventud y en la actualidad
Hace unas semanas Kramnik declaró que jugará al
ajedrez hasta los 40 años, por lo que sólo le quedan 4
años de disfrutar de los torneos. Parece que ante esta
decisión su actitud ha cambiado, juega de otra forma, más
alegre, peleando más de lo habitual y firmando alguna
partida realmente brillante (como la que ven). Parece
claro que ha habido un cambio de actitud, porque actitud
es lo que le ha faltado en los últimos años al
ex-campeón del mundo, ya que talento es algo ha
demostrado tener a lo largo de toda su carrera.
En cuanto al torneo, que conmemora los 100 años del
nacimiento del patriarca del ajedrez soviético Mikhail
Botvinnik, ha supuesto una nueva exhibición del
incombustible Anand. El indio lleva jugando al máximo
nivel más de 20 años y con un rendimiento excelente.
Llama la atención el mal torneo de Carlsen, el peor que
le recuerdo. Mucha gente en el mundo del ajedrez da por
hecho que Carlsen va a marcar una época, de momento no
lo está logrando y con decisiones como negarse a entrar
en el ciclo de candidatos no creo que vaya por el buen
camino. Por cierto, parece que Anand le tiene tomada la
medida... no sabemos que nos deparará el futuro en el
reino del ajedrez.
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