Pues ya hemos desembarcado en Villarrobledo (pueblo que resultará familiar a los amantes del rock (como yo), ya que esta localidad acoge el famoso festival 'Viña Rock'), la primera impresión te impacta directamente en la cara y es el tremendo calor que hace por estas latitudes. La solución ha sido la más lógica, buscar el centro de la ciudad y empezar a tomar unas heladas y refrescantes cervezas. Al desembocar en la plaza del ayuntamiento la primera persona que hemos visto ha sido Alexei Shirov, el último romántico estaba dando un paseo antes de empezar la lucha. Esta es la plaza en cuestión:

                Una vez que repusimos energía, buscamos la sala del torneo porque la cosa empezaba a las 16h, y ya pudimos ver el especial y extraño ambiente que rodea a una competición de ajedrez.

                Acudir a un torneo siempre es algo especial (al menos para mí). Poder ver en directo a alguno de los mejores jugadores del planeta es un privilegio, aunque tengo que decir que yo disfruto igualmente viendo cualquier tipo de partida, sea quien sea el que juegue.

                En España tenemos la fortuna de contar con gran multitud de torneos abiertos, lo que permite a los jugadores amateurs jugar contra GM y a los aficionados una gran variedad de posibilidades de ver a sus ídolos. Personalmente asisto a menos torneos de los que me gustaría, porque siempre es difícil encontrar tiempo para desplazarse a la ciudad donde se juegue.

                La sola presencia de Topalov atrae a los aficionados hacia la mesa número 1 en busca de una foto del ex-campeón del mundo, también se ha dejado ver cerca del búlgaro su polémico manager, Silvio Danailov. Por supuesto, Shirov también recibe la 'visita' de muchos aficionados, Leonardo da Vinci sigue teniendo mucho tirón y no son pocos los que admiran su estilo de juego agresivo.

                Los torneos de rápidas no son computables para la lista FIDE, cosa que hace que muchos jugadores jueguen relajados y no se esfuercen si las cosas no les van bien. Pero en un torneo con Topalov, Shirov o Mamedyarov esto seguro que no ocurrirá. De los primeros tableros he de destacar a Topalov, me ha parecido el más fuerte, ganando la mayoría de partidas con facilidad. De los favoritos he visto titubeante a Shirov, que tras hacer tablas en la 3ª Ronda (ante Rizouk) ha quedado bastante tocado y le he visto bastante agobiado. Ruslan Ponomariov también se ha dejado medio punto de forma inesperada (ante Guliyev) y por eso se ha quedado fuera del grupo de cabeza.

                La quinta ronda tuvo una importante partida en el tablero 1: Topalov-Mamedyarov, juego que iba a ser muy importante para el devenir del torneo. Ambos jugadores llegaban empatados con 4 puntos y también llegaban con excesivo respeto mutuo. Topalov trató de apretar, pero sin correr demasiados riesgos, para al final terminar en una posición de tablas claras tras una buena defensa de su rival.

                Me ha gustado el juego de un ilustre veterano: Ljubomir Ljubojevic, este jugador fue de los mejores del mundo hace décadas y parece que todavía guarda parte de su fuerza. Ha jugado un par de partidas de ataque trepidantes que me han tenido pegado a su tablero olvidándome de los primeros clasificados. Por desgracia en la última ronda protagonizó un desagradable incidente, con muchas voces incluidas, en el que parecía no llevar demasiada razón. También quiero destacar una partida de José Carlos Ibarra, que logró entablar ante Vadim Milov (5º en el ranking inicial) tras atacar con gran decisión y tener la victoria en sus manos.

                Para terminar, que ya toca irse a dormir, quiero resaltar la gran labor de la organización, sin duda un torneo muy agradable y llenos de muchos detalles positivos. Podéis ver algunas fotos que he sacado, así como la clasificación tras la 5ª ronda:

CLASIFICACIÓN