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La fama de imbatible de Ajeeb se extendió como un reguero
de pólvora por los Estados Unidos. Teniendo en cuenta los
jugadores que se acurrucaron en su interior en distintas
épocas no es de
extrañar que nadie pudiese derrotarlo. Pero estos triunfos
hay que saber valorarlos en su justa medida, los autómatas
se enfrentaban en muy pocas ocasiones a jugadores
profesionales, haciéndolo habitualmente contra personajes
famosos o contra aficionados que acudían a las
exposiciones.
En esta ocasión los 'timadores' se quedaron contrariados
ante la paliza que un aficionado le dio a su máquina
milagrosa. Lo que tal vez no sabían es que Charles Devide
tenía una estrecha relación con el ajedrez, conoció
personalmente a Wilhelm Steintz, sobre el que escribió un
libro como tributo, y llegó a desarrollar un buen nivel de
juego.
Imagen del
interior del libro "Memorial de Wilhelm Steinitz",
de Cahrles Devide
Además, Cahrles Devide también fue editor de la revista de
ajedrez "Chess magazine". Para completar la
información veamos una partida donde Devide fue derrotado,
de forma contundente, por el mejor jugador de la época, con
el que trabaría una amistad que se plasmó en el libro
antes mencionado:
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