Tigran Petrosian es un caso especial dentro de la
historia del ajedrez. Su forma de ser influyó de forma
desmedida en su estilo de juego, volviéndolo
conservador y timorato. Sin embargo, los que le
conocieron siempre alabaron la capacidad para el ajedrez
táctico que tenía el ex-campeón del mundo, que se
puede comprobar en las brillantes jugadas que desfilan
encima de estas líneas. Y tal vez
en esa capacidad se esconde su secreto para dominar el
arte de la defensa. Sus rivales siempre se sorprendieron
ante la facilidad que mostraba Petrosian para desbaratar
ataques varias jugadas antes de que ocurrieran, como si
tuviera rastreadores diseminados por todo el tablero
capaces de encontrar cualquier posibilidad de ataque del
adversario. Petrosian usó su talento para frenar el
talento del rival, eligiendo un camino en el que se
encontraba más cómodo y seguro.
Para sentirse a gusto ante el tablero, Petrosian siempre
contuvo su talento, buscando posiciones tranquilas y sin
sobresaltos. Por ello recibió muchas críticas, algo
que se puede comprobar leyendo las crónicas de la
época, aunque
es innegable que obtuvo excelentes resultados. En
ocasiones el fin justifica los medios... |