En ocasiones se tiende a creer que los conceptos
tácticos están reservados para que los aprendan los
principiantes... sin embargo, cuando uno va jugando
partidas se da cuenta de que muchas de ellas se deciden
por algún detalle táctico básico, como una clavada,
la amenaza de un ataque a la descubierta o unos rayos X
por sorpresa. Incluso muchas partidas del ajedrez de
competición se deciden por conceptos así.
Esta partida es un auténtico lío táctico, contiene
constantes clavadas y contraclavadas, lo que convierte
los cálculos de cada jugada en un laberinto complicado
y enrevesado. A veces se entiende que muchos jugadores
huyan de las luchas tácticas, ya que exigen un tremendo
desgaste físico... aunque también son el único camino
que conduce hacia la creación artística, la cual puede
hacer que el nombre de un jugador trascienda al paso del
tiempo. |